Escribo yo este romance
Para una tarde matar
Por las cosas que me atacan
En ciertos modos de hablar.
En la tele y en la radio
Y en la prensa sin parar
Dicen cosas sin sentido,
También en publicidad.
Se ve que no han estudiado,
Y si lo hacen, lo hacen mal.
Tampoco tiene disculpa
Quien no lo ve al revisar.
Comienzo con una norma
Que todos aplican mal,
Poniendo el imperativo
Con una erre al final.
¡Corred, comed y dormid!
Y no “¡Comer, dormir o estudiar!”
Con el “de que” nunca aciertan
Porque quieren evitar
El “dequeísmo” argentino,
En el fútbol, tan normal.
Porque “de que” está bien dicho,
De ejemplos hay más de un par,
“Darse cuenta”, “estar seguro”,
“Advertir” e “informar”,
por no citar otros tantos
que con “de que” siempre van.
Otra cosa que me mata
Cuando la oigo pronunciar:
Cierto modo de decir
El presente de “apretar”.
Cuando Pedro de la Rosa
Dice “APRETA” al comentar,
Se me suben los colores
Y no lo puedo aguantar.
En anuncios importantes
Que se deben revisar
Hay meteduras de pata
Que no deberían estar.
Por ejemplo, que “la Giga”
Que le ofrece Movistar
Debía ser masculina,
No Giga transexual.
Y también los de YAMÓVIL
No paran de machacar:
“son una de las empresas
que mas coches VENDEN”, ¡Ah!
¿Pero es que no se dan cuenta
sus copys al redactar
que sujeto y predicado
deberían concordar?
“Estallan las palomitas”
Vodafone quiere explicar
Para vendernos smartphones
Y su gran utilidad. (pronúnciese “vodafón” y “esmárfons”)
Dicen que el maíz explota
Como explicación genial
Dejándonos “ojipláticos”,
La duda sin aclarar.
Utilizar un sinónimo
Para la causa explicar
Es una majadería,
No un error gramatical.
Si tras este rapapolvo
Conseguimos mejorar
Daré este rato por bueno,
Un saludo, y ¡a mandar!